sábado, 26 de septiembre de 2009

El ejemplo de las hijas de Zapatero

No me entendáis mal o malinterpretéis: no soy del partido seudo-sociata ni fan de la gestión de Rodríguez Zapatero. Lo primero, porque me parecen más de derecha que obreros socialistas y, segundo, porque me parece que el presidente se ha dejado lamentablemente por el camino todos aquellos valores de un humanismo de izquierdas.
Pero, como ya han dicho en su sitio de la red social más conocida de internet los gemelos heavies de Tetuán, hay que tener los cojones bien puestos y el respeto y la tolerancia bien alta como para permitir que sus hijas se vistan como les apetezca incluso en visitas a gobernantes y sátrapas de otros lares y del IMPERIO.
Como persona que se ha vestido toda la vida tratando de salir del común de los mortales, y de negro desde hace más de una década, me parece increíble que un padre importante -mal que le pese a los fachas, peperos y demás chusma de ultraderecha-, apoye la diferencia y permita a sus "vástagas" vestir según el estilo que consideren propio sin exigencias de etiquetas ni de protocolos, ni de apariencias o imperativos sociales de supuesto buen gusto que imponen los ladrones y rameras de la mal llamada "gente de las clases altas".
Que ya está bueno de juzgar a las personas por la apariencia, que las valías no se miden por marcas ni estilos de moda ni hostias. Que los que roban en el Corte Inglesh no son los heavies ni los que llevamos pinchos, son las viejas pijas que se amparan en su supuesta respetabilidad de viejas de mierda de barrio pijo.
Que el que más roba no es el melenas, es el banquero y el empresario.
Que el desempeño laboral no depende de mi color ni estilo de vestimenta, ni de color de piel, ni cardado del pelo, ni marcas ni chorradas. ¡¡¡Que ya está bueno, coño de esconder tatuajes y quitarse piercings para que te den el puto curro temporal!!!
Que os vemos el plumero, psicólogos metidos a criba de recursos humanos, cuando se acude a las entrevistas.
Pero ante esta noticia los fachas y conservadores de siempre, los dictadores del mamarrachismo al que llaman "moda" y esos padres y viles sujetos que han insultado a estas crías y a su padre hasta la extenuación -pero que cuando sus hijos nazis clavan navajas a chavales inocentes por como visten reclaman porque los castigan sin salir después de las 22 horas por tres meses-, ahora OS JODÉIS. Porque en los USA la gente está flipando con la familia Rodríguez Zapatero-Espinoza, e incluso se creen que aquí en España los ciudadanos respetan la libertad de elegir la pinta que te pones (pero, claro, si la payasa ridícula de los lunares, las nubes, los corazones y el chabacanismo colorinche no hace un desfile, no es moda) y que esas cosas de las apariencias son asuntos superados.
Y, aunque las hijas de Rodríguez Zapatero son adolescentes y, probablemente en algunos años más quizá se rían de las pintas que lucían por esta época; aunque luego en su adultez transen con la masa uniforme y dictatorial del saber estar, tendrán la satisfacción y el orgullo de saber que sus padres han respetado su forma de ser, y las han apoyado sin importar los convencionalismos ni propios ni extranjeros.
Y eso es algo de lo que pocos pueden enorgullecerse.







.